Publicado a las 00:03h
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comunicación digital
En nuestros días, escribir correctamente no debería ser una gran virtud. Pero la realidad es tozuda y se empeña en demostrar, una y otra vez, la distancia que separa teoría y práctica. Problemas con la puntuación, bailes de tildes, intercambios entre be y uve (y no vale la excusa del teclado)... en definitiva, textos con faltas de ortografía y erratas por doquier.